DOS SEGUNDOS BASTAN PARA CAMBIAR EL MUNDO


Estábamos escribiendo una carta para Rafael cuando Minerva vino a buscarnos.
Así fue como…


“Rescatamos a un pajarín (que se había dado un buen golpe) y, como era tan chiquitín, lo metimos en un comedero para pájaros y cuando ya se encontraba un poquito mejor, se fue”. 


Esto es lo que cree Mara que pasó, sólo Carlos sabe por qué se fue.


¡A VECES PASAN COSAS INCREÍBLES!

0 comentarios:

Publicar un comentario